miércoles, 20 de abril de 2016

Reflexión inversa.

Al placer le dije adiós,
a la Luna un velo
de ver sin mar el Sol
de enterrar cualquier anhelo.

Y ya para qué olvidar si te amo,
luego resuena tu frase sincera,
de aquel desdén olvidado.

Poco tierno sentir
para el oscuro envinado,
su rapaz voluntad
sin decir nada sabio.

Y por qué rezar sin suerte,
ya apareces ante mí inherte,
de vacío, sombra, y luto,
suave esa música:
es poco un tributo.  

Febrero de 2016.



2 comentarios:

Pascual Herrera dijo...

Me quedo con el desdén olvidado. Es algo que se deja arrinconado y por eso hay quien mitifica momentos de su pasado. Bueno es lo que me ha trasmitido la reflexión. Es posible que en otra lectura sea inversa la sensación. Me encanta el aire barroco.

Jonathan Estrada dijo...

hacía tanto tiempo...